Guardia Civil y Policía Nacional han detenido en Granada a dos acusados de cometer robos a mano armada en comercios de diferentes localidades de la Comunidad de Madrid, Murcia, desde donde se habían refugiado con la sospecha de que estaban siendo sometidos a vigilancia.
La operación conjunta ha finalizado con el arresto de dos vecinos de la localidad de San Fernando de Henares, J.M.G.G. y B.S.M, de nacionalidad española y 33 y 28 años, respectivamente, a quienes se les imputan por estos hechos diez delitos de robo con intimidación cometidos en las provincias de Madrid y Murcia.
Según han indicado la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, la Unidad orgánica de la Policía Judicial de Murcia y la Jefatura Superior de Policía de Madrid en un comunicado, el juez ha decretado para ambos el ingreso en prisión.
De acuerdo con la investigación, que se inició en junio tras un robo en un salón de juegos de la localidad madrileña de Velilla de San Antonio, los detenidos accedían supuestamente a los establecimientos ocultos con capuchas y, tras intimidar a los empleados con un arma de fuego y un arma blanca, sustraían el dinero en efectivo.
En ese primer robo, amenazaron a una empleada y, tras sustraer un botín de más de 6.000 euros, se dio a la fuga en un color oscuro.
Entonces, agentes del grupo de Atracos de la Guardia Civil de Madrid abrieron las pesquisas y tuvieron conocimiento de que los grupos XII y XIII de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional estaban investigando la comisión de varios atracos en establecimientos públicos de Madrid.
Todos ellos coincidían en que los autores intimidaban a los empleados con un arma de fuego para posteriormente darse a la fuga, por lo que decidieron aunar esfuerzos para esclarecer los hechos.
Los trabajos de investigación han revelado que la pareja tuvo supuestamente una gran actividad delictiva y actuó en las localidades madrileñas de Velilla de San Antonio, Madrid, Coslada, San Fernando de Henares y Pozuelo de Alarcón.
Los locales donde robaban eran salones de juegos, gasolineras, sucursales bancarias y establecimientos de comida rápida, todos ellos situados en las provincias de Madrid y Murcia.
El cruce de datos permitió identificar al vehículo que empleaban para cometer los robos y, en segunda instancia, identificar a los atracadores.
Entonces, los investigadores detectaron que los investigados habían cometido dos robos con intimidación en salones de juegos de la localidad de San Javier (Murcia), localidad desde la cual los supuestos ladrones se desplazaron a Guajar Alto (Granada) por la sospecha de que se les investigaba.
Ambos fueron detenidos a finales de julio, después de que en el registro en el domicilio que ocupaban en Murcia los agentes hallaran en un falso techo de la vivienda la pistola con la que cometían los ilícitos, un cargador y tres cartuchos.
Durante la detención, los agentes intervinieron ropa y efectos personales, además del vehículo con el que huían de los establecimientos.
