La Guardia Civil de Castelló confirmó ayer que ha cursado una denuncia contra un «paranyer» por agredir a uno de los dos agentes medioambientales de la Generalitat Valenciana que lo habían sorprendido cazando aves de forma ilegal en el municipio de Càlig con el método prohibido del «parany».
Dicha denuncia fue interpuesta por los agentes horas después del ataque, que se saldó sin lesiones de consideración para el guarda forestal afectado. No obstante, la Guardia Civil ya investiga el caso con la intención de imputar posibles cargos de delito por agresión a la autoridad, ya que los agentes ambientales tienen la misma consideración que las fuerzas de seguridad cuando se encuentran en el ejercicio de sus funciones.Los supuestos hechos tuvieron lugar el miércoles 22 de octubre y no se trata de la primera vez que un grupo de «paranyers» amenaza verbalmente o agrede a agentes ambientales (que no operan armados) o incluso a Guardias Civiles.
A este respecto, el Juzgado de lo Penal Número 3 de Castelló ya había sentado precedente en 2012 al condenar por primera vez a un «paranyer» a prisión por delito de caza ilegal contemplado en el artículo 336 del Código Penal y agresión a agentes de la autoridad.
La sentencia condenó a este cazador castellonense a una multa de 1.400 euros por caza ilegal y a la inhabilitación para la práctica cinegética durante el período de un año. Además, la actitud violenta del acusado ante los agentes de la Guardia Civil suscitó una condena adicional a un año y seis meses de prisión por sendos delitos de atentado y de lesiones, así como una indemnización de 3.600 euros a los dos guardias civiles por lesiones que necesitaron hasta un mes de rehabilitación.