Que los túneles del AVE en el Levante llevan cerrados desde hace demasiado tiempo es algo bien conocido en la provincia. Sin embargo, C.N.V., un roquetero de 24 años, decidió que era una oportunidad para obtener un beneficio económico fácil, a costa de saquear estas instalaciones. Al menos eso es lo que sostiene la Guardia Civil, que detuvo al joven el pasado día 15 después de que los vigilantes de seguridad de la empresa adjudicataria de las obras lo sorprendiese en pleno robo.
Aunque es el único arrestado por el momento, el Instituto Armado cree que puede haber un grupo organizado tras unos robos que fueron denunciados en mayo y que se han repetido en distintas ocasiones. No en vano, los agentes investigan a otras tres personas por el mismo delito continuado de robo con fuerza en las cosas que se le achaca a C.N.V.
Fue la empresa adjudicataria la que cursó la denuncia el pasado mes de mayo, comenzando entonces las investigaciones para esclarecer la autoría de los robos. La Guardia Civil pudo identificar un vehículo que habría actuado en los mismos pero fue hace dos semanas cuando se precipitó todo, después de que los vigilantes de los túneles pillasen en plena actividad a C.N.V. y otra persona que logró escapar.
Al parecer, los presuntos autores de los robos utilizaban el citado vehículo para acudir a los túneles, dejando en ellos a varias personas, que cortaban los tubos de hierro destinados en caso de urgencia a la extinción de incendios con un grupo electrógeno y una radial de disco grande. Una vez recolectado el cable de cobre y distintos materiales, regresaba el automóvil, que llegaba a introducirse en el túnel a través de un agujero realizado a tal efecto, para recoger a los cacos y los objetos sustraídos.
