Una dotación del 091 se desplazó al momento la hasta la finca para corroborar los hechos y aplicaron el protocolo establecido para este tipo de casos. Dieron aviso al grupo Tedax-Nrbq. Cuando llegaron al lugar encontraron las dos granadas en el suelo junto a una pared, fuera de la cuadra. El autor del descubrimiento las había desplazado sin ningún tipo de protección, por lo que corrió el riesgo de que explotaran durante la manipulación.
Los agentes trasladaron los proyectiles hasta unas instalaciones seguras para analizarlos, identificarlos y neutralizararlos. Constataron que se trata de dos granadas de mortero tipo Valero de 81 milímetros, que estaban cargadas con trilita de 550 gramos. Su peso asciende los cuatro kilogramos (4,175), su longitud es de 295 milímetros.
Contenían una carga explosiva de trilita de más de quinientos gramos
Este tipo de explosivos fueron muy utilizados durante la guerra civil en sus distintos frentes y abundaron en la zona norte. Hace tres meses el equipo de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil de Valladolid hizo lo mismo con otros dos proyectiles descubiertos por el propietario de una vivienda mientras limpiaba. Carecían de espoleta y con su carga explosiva activa.
Ante esta situación, la Jefatura Superior de Policía de Asturias insistió ayer en que es importante no manipular estos explosivos. Muchos de ellos, según añadieron, conservan intactas sus propiedades y pueden explosionar con facilidad. Es más, aquellos artefactos que se encuentran deteriorados son más peligrosos. Inicidieron en la importancia de que la persona que vuelva a encontrarse con granadas u otros artefactos avise de inmediato a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, serán ellos quienes se hagan cargo de su traslado y posterior desactivación.
Fuente: https://www.elcomercio.es/oviedo/policia-nacional-desactiva-20190528001233-ntvo.html