Algo más de dos meses de exhaustiva investigación han sido necesarios para detener al presunto autor de un crimen que estremeció a la localidad castellonense de Burriana el pasado mes de abril.
La Guardia Civil ha detenido a la pareja sentimental de la mujer que fue hallada en un huerto por su presunta implicación en los hechos. La investigación ha sido llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Castellón.
En la tarde de ayer, el arrestado compareció ante la jueza del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vila-real quien acordó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de un hombre detenido como presunto autor de la muerte de su compañera sentimental, una mujer cuyo cadáver fue localizado el pasado mes de abril en un paraje natural de la localidad. El detenido queda investigado en una causa abierta por un delito de homicidio, sin perjuicio de ulterior calificación. Las actuaciones están declaradas secretas.
Las pesquisas trataban de averiguar lo que ocurrió en la mañana del pasado 22 de abril cuando, en el camino Vell de la Mar de la localidad se halló el cuerpo sin vida de una mujer.
Agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Castellón, iniciaron una investigación para el esclarecimiento de los hechos y circunstancias del fallecimiento, que tras dos meses de intensas investigaciones culminaron el día 29 del pasado mes de junio con la detención en la población de Burriana de un varón como supuesto autor de un delito de homicidio.
Las diligencias instruidas junto con el detenido han sido entregadas en los Juzgados de Vila-real.
Según fuentes cercana a la investigación, no hubo ningún tipo denuncia previa por violencia de género por parte de la víctima hacia su pareja, presunto autor de su muerte.
Y es que la mujer hallada muerta ese jueves por la mañana en un paraje de Burriana no falleció por causas naturales, puesto que presentaba signos de estrangulamiento. Así lo reveló la autopsia realizada en el Instituto de Medicina Legal de Castellón. El cadáver de Andrea J. A. presenta señales que llevó a los forenses e investigadores de la Guardia Civil a considerar una posible muerte de etiología homicida, aunque en principio no descartaron otras hipótesis. El cuerpo sin vida de la mujer colombiana fue encontrado en el Camí Vell de la Mar cerca del Clot de la Mare de Déu, un espacio singular que fue declarado en 2002 paraje natural municipal. La víctima tenía 41 años y residía en Burriana. Tras conocer los resultados de la autopsia, el Grupo de Homicidios de la Guardia Civil de Castellón asumió la investigación del caso.
El camino donde fue hallado el cadáver bordea los campos agrícolas y está próximo a las playas de Burriana y es frecuentado por agricultores, vecinos del municipio y turistas que se desplazan a la costa castellonense en busca de sol y tranquilidad.
Tras confirmarse que se trata de un crimen serían ya cuatro las mujeres asesinadas en la Comunitat Valenciana en menos de seis meses. Tres de las víctimas murieron por estrangulamiento y los cadáveres fueron hallados en acequias de Elche, Silla y Valencia. Sin embargo, los investigadores de la Guardia Civil y la Policía Nacional no establecieron ninguna relación entre estos casos, sino que únicamente hablaron de un modo de actuar similar por parte de los autores de estos hechos.
Aunque en los últimos meses también se han difundido varios bulos a través de WhatsApp sobre la búsqueda de un asesino en serie como sospechoso de haber cometido los tres crímenes, la realidad es bien distinta y no hay ninguna persona identificada como autor de las muertes violentas. Además, la foto que ilustra la información falsa corresponde a un delincuente que nada tiene que ver con los asesinatos según han informado fuentes cercanas a las distintas investigaciones.