Atentar contra la libre competencia, los derechos de los trabajadores, contra la seguridad medioambiental o cometer fraude fiscal. Estos son sólo algunos de los delitos en los que estarían incurriendo la decena de talleres mecánicos ilegales que la Guardia Civil detectó en la provincia durante el último trimestre de 2014.
Una operación liderada por el Seprona que les llevó a recorrer hasta 70 talleres dejando de manifiesto que este tipo de negocios están a la orden del día entre nuestras fronteras. «La crisis económica» tiene parte de la culpa de esta proliferación, según indican fuentes de la Guardia Civil, que sin embargo aclaran que la tendencia en estos últimos meses es «a la baja».
El principal reclamo de estos establecimientos son sus precios «asombrosamente inferiores» a otros talleres que cumplen con todas las normativas.
«Hay casos de reparaciones de coches que se han hecho por 1.000 euros cuando el coste real asciende hasta los 4.000», indican desde la Asociación de Talleres de Reparación de Vehículos de León Tarevel, que desde hace años persigue este tipo de fraudes. De hecho, desde 2011 la asociación integrada en la Federación Leonesa de Empresarios ha recibido 22 escritos de denuncia sobre 16 talleres ilegales ubicados en León, la mayoría remitidas durante 2012 y 2013. «Ante cualquier persona que nos informe sobre una supuesta situación de reparación ilegal y proporcione datos suficientes, nosotros ponemos a su disposición un escrito que después enviamos por duplicado al Ministerio de Trabajo y otro a la Agencia Tributaria para que sean ellos quienes tomen las acciones oportunas», puntualizan.
De las 16 denuncias presentadas hasta la fecha por la asociación, en 8 casos recibieron contestaciones formales por parte de ambos organismos de las que sólo una se desestimó al no encontrar anomalías. «En todas ellas aclaraban que iban a tomar las acciones oportunas». Acciones que en la mayoría de los casos terminarán con diferentes inspecciones. Desde Tavarel valoran ahora la posibilidad de ampliar esas denuncias al Seprona.
La competencia desleal o los diferentes atentados contra los derechos de los trabajadores son dos de las causas principales que llevan a la Guardia Civil a perseguir con fuerza esta práctica. «En la última inspección dimos con profesionales que carecían de contrato, locales que no pagaban impuestos, precios que no se ajustan a las leyes de libre competencia e incumplimientos de medidas de seguridad medioambiental», remarcan desde el Seprona. Una operación rutinaria —suelen llevarla a cabo al menos una vez al año— que en el caso del último trimestre de 2014 tenía como objetivo principal desenmascarar «ataques» contra el medio ambiente y que acabó sacando a la luz estos 10 talleres mecánicos ilegales «repartidos entre la capital y varias zonas de la provincia», subrayan.
A nivel nacional
A nivel nacional los datos se disparan. Según la Confederación Española de Talleres de Reparación de Automóviles y Afines (Cetraa), desde febrero de 2014 han acumulado 340 denuncias contra estos negocios, lo que para esta organización supone un éxito de participación ciudadana. Las quejas más habituales, según Cetraa, están relacionadas con la ausencia de placa identificativa, evasiones de impuestos, empleados en situación irregular cuyas jornadas de trabajo se extienden hasta altas horas de la madrugada, ausencia de medidas de seguridad o vertidos ilegales, entre otros.
Estos talleres de dudosa legalidad suelen situarse en lugares poco habituales, como garajes, casas particulares o jardines privados. Y aunque atraen a los clientes con precios inferiores a otros, desde Cetraa también han recibido denuncias por estafa. «Cuando vas a pagar, te suben el precio establecido con explicaciones poco convincentes, utilizan materiales de segunda mano que se estropean a la mínima o simplemente te amenazan», explican.
