La Guardia Civil centra sus pesquisas sobre la joven Diana Quer en su teléfono móvil, el aparato que llevaba encima cuando desapareció hace más de un mes.
Y dentro de sus investigaciones, según explicaron a este periódico fuentes de la investigación, ha realizado ‘gestiones técnicas’ que han supuesto que el móvil haya aparecido ahora activado y que sus programas de envío de mensajes aparezcan entre los integrantes de su agenda como activos. Pero la activación ha sido provocada por la propia Guardia Civil.
Según estas fuentes, el hecho de que ahora algunos de sus ‘amigos’ vean que sus mensajes han sido recibidos en el teléfono de la joven no significa que el aparato haya sido de nuevo activado por la propia desaparecida o por aquellos que pudieran estar con ella, sino que es una activación artificial puesta en marcha por la Guardia Civil para avanzar en la recuperación de mensajes de la joven que permitan concretar sus pesquisas sobre la desaparición, de la que este jueves se cumplió un mes.
Estas fuentes apuntaron que para los agentes es clave conocer con detalle la relación de mensajes con algunos de sus ‘amigos’.
Obstáculos a la investigación
El director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha afirmado, en declaraciones recogidas por Europa Press, que «las filtraciones no contrastadas» en el caso de la desaparición de Diana Quer pueden «entorpecer una investigación de por sí ya complicada». Y que si se filtraran datos desde el Instituto Armado se podrían «dar pistas» a alguna persona que estuviera esperando a ver por dónde van las pesquisas.
De Mesa ha apuntado al respecto que la Guardia Civil no ha abandonado las dos líneas iniciales de la investigación, la de la desaparición forzosa y la voluntaria, y que ha puesto a su disposición todos los medios técnicos, económicos, de personal y plantilla necesarios para «obtener pistas y pruebas».
En la misma línea se ha expresado este viernes el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz. «Se trabaja ya únicamente sobre dos vías de investigación», ha explicado a preguntas de la prensa, «o una desaparición forzada o una desaparición voluntaria».
La exhaustiva reconstrucción de la Guardia Civil sitúa el móvil de Diana conectado por última vez pasadas las cuatro de la mañana a unos 20 kilómetros de A Pobra, en Rianxo, el lugar donde se llevó a cabo la última batida el 9 de septiembre y a donde se desplazó personalmente el director del Instituto Armado. «Los datos que se van consiguiendo hacen oportuno buscar en esa zona situada al final de la ría de Arousa», dijo.
Este miércoles, Diana López-Pinel volvió a reclamar la colaboración ciudadana en una declaración a los medios desde la puerta de su casa centrándose en la hipótesis de que su hija desapareció tras subirse en un coche. «Hago un llamamiento a quien haya podido verla subirse a un coche», ha dicho antes de dirigirse emocionada a su hija: «Si me puede ver o sentir, Diana, mamá te ama, mamá te espera, y mamá te busca y te va a buscar hasta que aparezcas».
El padre de la joven, Juan Carlos Quer, fue más pesimista días atrás al reconocer que «las expectativas de encontrarla con vida no son las mejores».
Fuente: http://www.elmundo.es/sociedad/2016/09/23/57e504ce22601dc0578b4595.html