«Sucede ya cada año, pero lo cierto es que cada verano la situación es peor». La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) advirtió ayer de que los recortes en plantilla en el Instituto Armado están provocando que durante los meses de julio y agosto la demarcación de Córdoba se encuentre «desbordada», hasta el punto de que los uniformados «no pueden atender debidamente sus tareas encomendadas, con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos y con el sobreesfuerzo que deben realizar para suplir la falta de personal».
El colectivo de guardias civiles lamentó que esta situación «lamentablemente», se produce en el conjunto de España, ya que el movimiento de la población hacia zonas habituales de vacaciones, especialmente hacia la costa, pero también al medio rural en el interior peninsular, «no se ve debidamente compensado con un refuerzo» de los efectivos de este cuerpo de seguridad del Estado. Para la AUGC, ocurre «más bien al contrario», puesto que lamentó que a las vacantes por cubrir se suma que en verano las plantillas de la Guardia Civil se reducen un tercio con motivo de las vacaciones de verano de los agentes.
Ante estas «carencias», la asociación subrayó que «se debería actuar», por un lado, aumentando la oferta de empleo público para ampliar y reducir la edad media de la plantilla, y por otro lado aplicando medidas de reorganización de las unidades en la provincia para poder así disponer de mayor potencial, tanto en recursos humanos como materiales. «Algo que sin duda beneficiaría la efectividad de la seguridad pública en pro de una mayor seguridad», apostó el colectivo de agentes. La AUGC lamentó, no obstante, que los sucesivos gobiernos «se han negado a implementar» esta propuesta «por meros motivos de rentabilidad política, abocando a una situación cada día más caótica y deficitaria», y ello que es la ciudadanía «la principal perjudicada, como evidencian las numerosas quejas por falta de atención que se están recibiendo al respecto».
«Especialmente grave» resulta para la AUGC la falta de efectivos en la provincia de Córdoba. Y es que el colectivo recordó que sólo se dispone de un guardia civil por cada 691 habitantes, situación que se agrava mucho más en verano, porque un tercio de los 1.151 efectivos se encuentra de vacaciones.
La Asociación Unificada ya vaticinó hace meses que el verano de 2016 «no solamente iba a ser muy caluroso, sino también muy sacrificado para los guardias civiles y los ciudadanos, que se ven obligados a ser pacientes y comprensivos con unos trabajadores que a pesar de su esfuerzo y sacrificio no podrán atender con suficiente prontitud y profesionalidad todas sus misiones».
Hace unos meses, el colectivo también reclamó la aplicación de turnos de trabajo, del mismo modo que «cualquier otro trabajador, para que no quede al arbitrio de cada jefe de unidad». «Resulta imposible que los guardias puedan conciliar su vida laboral y familiar sin la implantación de unos adecuados turnos de trabajo», dijo la AUGC. A esto se suman ahora las quejas por la falta de plantilla en verano.