España, pero en concreto León, registrar datos de seguridad mayores a los de la media de los países del entorno. Varios factores influyen en este hecho, como la propia actitud ciudadana, pero también por el hecho de los ratios de efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado son mayores que la media europea.
Sin embargo, el número de efectivos de las empresas de seguridad privada es inferior al de la media, por lo que “el Estado precisa de su incremento” en cuanto a trabajadores, como un nicho que contempla posibilidades de creación de empleo y riqueza económica.
El subdelegado del Gobierno en León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha afirmado este viernes que la nueva ley de 2014 que regula el ejercicio de la seguridad privada “va en esa línea”. El sector se enfrenta a un momento de cambio, después de que se haya modificado la anterior, de 1992, y que “pone el acento en la complementariedad” de esta seguridad privada con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Un «antes y un después»
La norma marca “un antes y un después”, proporciona “confianza” y supone un “reconocimiento del Estado”. Todo ello, sin olvidar que la seguridad pública es “núcleo esencial” de una “competencia exclusiva” del Gobierno, que no es otra que garantizar el libre ejercicio de los derechos y de la seguridad de los ciudadanos.
Por eso, Suárez-Quiñones ha señalado como una “razón lógica” que este sector esté “controlado” por la seguridad pública, pero sin “despreciar” a las empresas privadas, que son “esenciales y un aliciente de futuro” para “lograr determinadas metas en la colaboración público-privada”, tan demandada en otros ámbitos.
Menciones Honoríficas
Fruto de esa buena relación, la Subdelegación del Gobierno en León ha acogido este viernes el acto de entrega de las Menciones Honoríficas que el Ministerio del Interior concede a empresas de seguridad privada. Se trata de tres jefes de seguridad privada, doce vigilantes, tres vigilantes de explosivos y guardas forestales, una detective privado, a un trabajador a título póstumo y a un policía nacional con cuarenta años de servicio en el cuerpo.
Este homenaje ha servido para reconocer a estas personas, que en esa función de seguridad y en su particular ámbito, han protagonizado un papel “sobresaliente” en sus funciones. De esta forma, se cierra una programación que en estos últimos días se ha realizado entre el sector privado y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.