Un ladrón robó el pasado jueves en la estación de Santa Justa una bolsa que contenía las cenizas del ciudadano finlandés que se arrojó el pasado 7 de febrero desde la Torre del Oro. Los padres de este hombre se habían desplazado a Sevilla desde Finlandia para identificar el cadáver, que fue incinerado en la capital andaluza después de que se le practicara la autopsia. Se disponían el jueves a tomar un tren para ir a Málaga, desde donde partirían ese mismo día en un vuelo de regreso hasta la ciudad de Helsinki.
Cuando se encontraban en la terminal ferroviaria, un ladrón les sustrajo al descuido la bolsa que contenía las cenizas de su hijo. Los padres comunicaron lo ocurrido a la Policía Nacional en la misma estación, pero luego se subieron al tren que esperaban y optaron por presentar la denuncia, con más tiempo, en Málaga. Siendo un asunto tan sensible, la Policía inició la investigación incluso antes de que se presentara la denuncia formal por el robo.
Los investigadores identificaron rápidamente al presunto autor del robo, un ciudadano argelino de 37 años cuya identidad responde a las iniciales R. D. y que tiene múltiples antecedentes delictivos.
La Policía estableció una vigilancia en torno a su último domicilio conocido, que dio sus frutos a primera hora de la tarde de ayer. El presunto autor del robo fue detenido por la Policía y permanece en los calabozos de la Jefatura Superior.
Los agentes están buscando ahora las cenizas del ciudadano finlandés, que podrían haber sido arrojadas a la basura o en plena calle por el delincuente cuando se dio cuenta de que en la bolsa no había nada de valor. Los investigadores han solicitado la colaboración de la empresa municipal de limpieza, Lipasam, a la que se ha pedido que revise con especial cuidado la basura que se haya recogido desde el jueves en los alrededores de la estación de Santa Justa.