La Guardia Civil ha detenido, en colaboración con la Policía Local de Adra (Almería), a un hombre de 37 años acusado de asaltar, mientras sus moradores dormían, ocho viviendas en Órgiva (Granada), a las que accedía escalando farolas.
El detenido es un hombre de nacionalidad marroquí al que también se le atribuyen dos robos con violencia e intimidación y otros dos robos de uso de vehículo a motor perpetrados también en la localidad granadina, ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado.
El arrestado es un escurridizo delincuente que se había especializado en robar ordenadores, teléfonos móviles y dinero en el interior de las viviendas mientras los moradores dormían, lo que generó gran alarma social porque en varias ocasiones las víctimas se despertaron durante el robo y vieron cómo huía el ladrón.
Los robos fueron perpetrados durante los meses de enero y febrero en un primer momento y el pasado mes de agosto en una segunda acometida, según la Guardia Civil, que averiguó que entre ambos periodos el presunto ladrón huyó a refugiarse a la localidad almeriense de Adra, donde los agentes recuperaron además los dos coches que supuestamente había sustraído en Órgiva para huir.
El detenido utilizaba las farolas como medio para acceder a las viviendas en las que presuntamente robó, situadas todas en las primeras plantas de los edificios.
La madrugada del pasado 11 de agosto una de las víctimas despertó y vio al ahora detenido dentro de su dormitorio con su cámara de fotos y su teléfono móvil.
La mujer comenzó a gritar y el ladrón huyó por la ventana y por una farola que hay frente a su dormitorio por la que al parecer había escalado hasta su casa, y mientras huía la amenazó de muerte.
Ese mismo día, también de madrugada, un vecino de Órgiva que acababa de regresar del trabajo sorprendió al detenido cuando intentaba entrar en su casa por una terraza de la primera planta.
Aunque el vecino intentó retenerlo, el ladrón consiguió huir, y tres días después volvió a colarse en una vivienda tras escalar una farola.
Mientras dormían los moradores recorrió la vivienda y llegó hasta la habitación de la hija de la víctima, de 13 años, y tras abrir y registrar todos los cajones, sustrajo 2.500 euros, tres teléfonos móviles, un ordenador portátil y joyas, tras lo cual huyó.
Para detenerlo, su fotografía fue difundida entre la Guardia Civil y la Policía Local de Adra, que consiguió identificarlo, detenerlo y ponerlo a disposición de la Guardia Civil hace unos días.
El detenido, que ha ingresado e prisión, ya fue arrestado en diciembre de 2011 durante la fase de explotación de la operación «Mancazuñas», en la que se le imputaron otros diez delitos de similares características.